martes, 5 de febrero de 2008

Naturaleza


Alguna vez ¿has complacido a tus cinco sentidos al mismo tiempo?
Es raro ¿no?, Llegar al punto máximo de relajación y plenitud espiritual
Pero ¿como lograrlo?
La respuesta es muy simple, solo déjate llevar por la fascinante vitalidad de la naturaleza, que nos coloca ante nuestras ojos su inconmensurable belleza para desvanecer las pesadumbres y tormentos que soportamos a diario.
Cuando te dejas llevar por el ostentoso paisaje natural en el que te encuentras, sientes como cada partícula de paz difunde por todo tu cuerpo, desde la base hasta el entendimiento, produciendo una sensación de libertad-alegría y a la vez dependencia- melancolía.
Lo sé, es imposible percibir aquellas sensaciones en conjunto, pero es una utopía no advertirlas.
Espero que los que logren experimentar la armonía que entrega la naturaleza, valoricen al igual que yo, la generosidad de ésta, para que cada vez seamos más los que ayudemos a preservarla por mucho tiempo.

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